Modelo de Desarrollo Integral: La experiencia Caluco

“En mi casa somos seis. Mi esposa y yo, y cuatro hijos, tres varones y una hembra. Están en noveno, octavo y tercer grado los varones. La niña está en kínder. Con esto de las hortalizas tengo más oportunidades de llevar bienestar a mi casa. En un momento dado, no sólo en este cantón si no en todo Caluco, caímos en la extrema pobreza. Entonces Fusades vino y nos echó la mano. Hemos dado un giro, hemos ido saliendo, no de la noche a la mañana. Ahora tenemos unos ingresos que no teníamos antes”.

Son palabras de Arturo Preza Castrillón, un agricultor que habla con calma y ganas de contar su historia, buscando las palabras que parece encontrar entre los dedos de sus gruesas manos. Para entender mejor estas palabras y saber dónde queda Caluco, qué es Fusades, cómo les echó la mano a los habitantes de Caluco, cuál fue el giro en sus vidas y qué se puede aprender de esta experiencia, fue escrita esta historia.

El principal objetivo de la iniciativa "Modelo de Desarrollo Integral: La experiencia Caluco" fue diseñar y aplicar un modelo de desarrollo sostenible para combatir la pobreza en Caluco, un municipio clasificado en extrema pobreza severa y el quinto más pobre del país.

Hoy Caluco cuenta con un nivel más alto de reconocimiento a nivel nacional, ha pasado de la posición 5 en situación de pobreza, a ocupar el puesto número 45, entre 262 municipios en El Salvador. También ha incrementado su capital social, ha fortalecido las capacidades colectivas de la comunidad y del gobierno local y ha afianzado los valores democráticos, en un lapso relativamente corto de 10 años.

Esta iniciativa fue ganadora de la primera versión del Premio Transformadores 2013. 

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