Reencuentro con el Futuro: el FIR2021 dejó grandes reflexiones y lecciones

Después de 5 días de trabajos, entre el 4 y el 8 de octubre, concluyó con éxito, el Encuentro Anual y el Foro Internacional de RedEAmérica, FIR 2021.

A través de nueve (9) sesiones temáticas con 30 expositores, Rondas de Aprendizaje y Visitas Virtuales a Proyectos, se repasaron los nuevos y viejos desafíos de América Latina, las transformaciones requeridas, las prácticas de las cuáles podemos aprender, el rol y las contribuciones de empresas, fundaciones e institutos de cara a construir el futuro.

En cada uno de los temas, las reflexiones entregaron nuevas luces para reencontrarnos con el futuro, y ser parte activa de la historia que queremos construir.

Muy pronto estarán a disposición de todos, las memorias del FIR, las Rondas y las Visitas. Mientras tanto, queremos compartirles algunos de los hallazgos y los nuevos asuntos que se desprendieron de esta nutrida jornada. (leer más)

Cuatro grandes transformaciones fueron apuntaladas como necesarias para construir un futuro sostenible, equitativo e inclusivo para América Latina:

1. La Primera, poner la naturaleza en el centro, como la fuente y la base de la vida, para responder a la crisis climática, pero también para poder avanzar en los tres siguientes desafíos.
2.  La segunda, superar las desigualdades y las exclusiones, y caminar hacia una economía del cuidado.
3. La tercera, crecer económicamente, pero preguntarse para qué crecer, para quiénes, cómo, y qué productos requiere la sociedad para avanzar al desarrollo sostenible. Un enfoque más allá del mercado.
4. Fortalecer la democracia entendida como el sistema que crea las condiciones sociales, culturales y políticas necesarias avanzar en lo que interesa al bien común, para caminar hacia el desarrollo sostenible.

Las conversaciones fueron más allá de los asuntos, apuntarán visiones y formas de actuación. En este sentido, resaltaron  la  importancia de que los distintos actores se vean cómo parte de un sistema, interdependientes, corresponsables, y abiertos a articular esfuerzos; la importancia de hacer lecturas sistémicas de los desafíos y plantear respuestas articuladas e integrales que generen mayor impacto; de conectar agendas intersectoriales, y enlazar las agendas locales, regionales y globales. Adicionalmente, se habló sobre la importancia de que las empresas, fundaciones e institutos contribuyan a construir capacidades en todos los actores; ejerciten cada vez más y mejor la escucha, estén abiertas a practicar y fomentar el dialogo, a tender puentes, a facilitar el encuentro en torno a lo que nos une, a confiar en las comunidades y en el sector público, a actuar en colectivo. Todos ellos, elementos afines a los planteamientos de RedEAmérica.

En el panel sobre institucionalidad local fortalecida, además de la construcción de capacidades, se hizo hincapié en tres factores clave impulsores de mejoras en la gestión pública local, en los cuáles podemos contribuir: fomento de liderazgos sociales y políticos orientados al bien común, más allá de las elecciones; promoción de ejercicios de transparencia, circulación y apertura de la información; apoyo a ejercicios de participación ciudadana, rendición de cuentas y control social.

Reducir la brecha y acelerar la revolución digital con criterios de inclusión, fue tema de uno de los paneles y retomado en varios otros. En este punto, se repasaron las brechas y el tamaño del desafío para asegurar acceso universal a internet y construir competencias digitales en la región. Fue posible entender mejor que la profundización digital, trae oportunidades para la inclusión, pero también puede profundizarlas.  Además, se advirtió la necesidad de estar alerta y prever medidas para contrarrestar los resultados no deseados de la ampliación digital, y manejar los nuevos desafíos que surgirán. También quedó claro la importancia de plantear estrategias conjuntas e integrales en lo digital, social, económico y normativo para abordar intersectorialmente, las brechas y las barreras.

En educación, se ratificó que los desafíos para alcanzar una educación inclusiva, equitativa y de calidad, no son sencillos. Se señaló la importancia de retomar el debate previo a la pandemia, y enriquecerlo con lo aprendido durante la emergencia sanitaria, dado que ésta generó una serie de cambios e innovaciones espontáneas que vale la pena revisar e incorporar. La pandemia rompió el sistema educativo, pero esto se convierte en una oportunidad para construir un nuevo modelo educativo que permita acelerar el proceso de cambio.

En el panel sobre salud, se resaltó que, sin salud, la economía y la sociedad no funcionan, y el desarrollo no es posible. Las empresas y las fundaciones tienen un abanico amplío de asuntos, estrategias y arreglos institucionales para estructurar su contribución al fortalecimiento de los sistemas de salud.

Se remarcó que la situación del hambre y la seguridad alimentaria es muy critica en América Latina. Retrocedimos y las metas de nutrición de la Agenda 2030 están lejos de ser cumplidas. Se hizo una invitación a leer el problema a partir de un enfoque sistémico con perspectiva étnica y territorial. Así mismo, a promover acciones intersectoriales en diversos ámbitos que reúnan múltiples actores para contrarrestar las causas coyunturales y estructurales de el hambre y la falta de seguridad alimentaria.

Reconstruir el tejido económico con inclusión, fue otro de los temas. Las lecciones que surgieron de esta conversación, ayudarán a perfilar iniciativas orientadas a la reactivación económica con inclusión. Estas son: pensar la inclusión productiva de forma sistémica, e incluir la perspectiva territorial; impulsar acciones coordinadas e integrales para atender las diversas aristas de la problemática; conectar oferta y demanda; acompañar en el fortalecimiento de capacidades blandas, de producción, comercialización y empresariales; facilitar la alfabetización digital y el uso de la tecnología; construir habilidades financieras; fomentar la oferta de servicios y productos financieros pertinentes y accesibles a este perfil de poblaciones; promover nuevos modelos de consumo; e incidir en políticas públicas con base en evidencia.

De la maravillosa conversación con los líderes comunitarios, quedó claro el difícil momento que han vivido y su percepción de un futuro incierto. De otro lado, se comprobó una vez más, los valores y las capacidades que poseen las organizaciones comunitarias para hacer frente a adversidades, con solidaridad, agilidad y creatividad. También quedó claro que las organizaciones de base son aliados necesarios y estratégicos para combatir la exclusión, la pobreza y la desigualdad.

El FIR2021 resultó ser una rica combinación de presente y futuro, de aspectos coyunturales y estructurales, de voces diversas, y de caminos. ¡Gracias a todos los que nos acompañaron en estas jornadas! ¡Gracias a la IAF, al Instituto Votorantim y a la Fundación Popular por apoyar su realización! Gracias al Comité consultivo integrado por miembros de RedEAmérica, por sus orientaciones en la construcción de esta agenda.

Seguiremos fuertes, vibrantes y conectados para impulsar transformaciones y construir comunidades sostenibles.