En 2016 dimos nuevos pasos para enfrentar los desafíos derivados de nuestro plan estratégico.
El primero de ellos se orientó a consolidar el foco y el enfoque de RedEAmérica. Una de las tareas fundamentales de la Red en esa perspectiva fue profundizar en la visión de comunidades sostenibles con enfoque de desarrollo de base. Los Ciclos de Aprendizaje se convirtieron en la herramienta idónea para reunir más de sesenta miembros en tres sesiones virtuales en las cuales se debatieron conceptos, se intercambiaron prácticas y se nutrió una nueva versión del documento sobre el tema.
Con estos avances conceptuales adaptamos los formularios del Radar, instrumento usado por los miembros para autoevaluar la aplicación del enfoque. Lo propio se hizo con los formularios y reglamento del Premio Transformadores.
En 2016 también avanzamos en crear un marco y abrir caminos para que las empresas incorporen el entorno social en sus modelos de negocio a través del documento “Grandes oportunidades para las empresas cuando integran asuntos sociales a sus negocios”, discutido con 45 organizaciones empresariales de cinco países.
En síntesis, avanzamos en consolidar nuestro enfoque de la manera que mejor sabemos hacerlo, con la participación de todos los miembros, quiénes han aportado sus conocimientos, experiencias y sus propios desafíos para construir un enfoque pertinente y relevante con el cual transformar la acción.
Para atender al desafío de posicionar más y mejor la Red hacia dentro y hacia fuera, en 2016 trazamos, con la participación de la Junta Directiva, una estrategia y un plan para este fin, que iniciará su ejecución en 2017. El plan introduce nuevas acciones y reafirma otras que ya estaban en implementación.
En cuanto a la consolidación de alianzas, en 2016, continuamos con la ejecución del Programa Empresa + ComUnidad, junto con la Fundación Interamericana (IAF) y la Red de Multinacionales Mercados Emergentes de la GIZ. Así mismo, los miembros siguieron ejecutando las iniciativas impulsadas en alianza con la IAF, creadas bajo el Acuerdo de Cooperación suscrito entre esta fundación y la Red. Iniciamos también, a finales del año, un ejercicio de balance alrededor de este Acuerdo, que concluye en 2017, para pensar en una futura cooperación.
Adicionalmente, continuamos la búsqueda de aliados para la implementación de una nueva iniciativa en inclusión económica, que tiene como objetivo fortalecer las organizaciones comunitarias vinculadas a cadenas productivas locales y facilitar su inserción sostenible en los circuitos de generación de riqueza para mejorar el nivel de ingresos de sus asociados y dinamizar la economía local.
El propósito de consolidar vínculos de colaboración ha sido constante en la Red, y siempre será importante ampliar el número de aliados, así como consolidar y profundizar las alianzas. Sin embargo, más allá de este reto permanente, es importante señalar que las alianzas que posee la Red son productivas, sólidas y con perspectiva de actuación conjunta de mediano y largo plazo.
Un tercer desafío al cuál la hicimos frente en RedEAmérica se refiere a nuestro público objetivo. Este reto se expresa en los propósitos de llevar la acción de la Red de forma más directa a un público nuevo, las empresas, así como retener los miembros actuales e incorporar nuevos. Fortalecer y acompañar los nodos también hace parte de este desafío.
Aunque falta mucho por lograr, las acciones realizadas como parte del Programa Empresa + ComUnidad han propiciado un mayor acercamiento a las empresas como tal. Así mismo, en 2016, logramos una mejor comprensión de la oferta de la Red por parte de los miembros, gracias a un esfuerzo por comunicar mejor el portafolio. De igual forma, las acciones emprendidas para entender mejor las expectativas e intereses de los miembros están dando resultados.
En la encuesta anual que realizamos en 2016, 72 % de los miembros consideraron que la contribución de RedEAmérica es alta en cuanto a conocer e intercambiar experiencias; 65 % en cuanto a comprender, profundizar e innovar en los conceptos; 61 %, en cuanto a visibilizar conocimientos y experiencias y 55 %, en cuanto a establecer contactos relevantes. El 70 % está totalmente satisfecho con la Red, y el 23 % lo está de manera parcial.
Con relación al fortalecimiento de los Nodos hubo conquistas, pero también surgieron nuevos desafíos a lo largo de 2016. Será necesario repensar juntos cuál es la estrategia de consolidación que debemos impulsar para fortalecer los Nodos, que son una pieza clave para el éxito de la Red.
Fiel a su espíritu, RedEAmérica sigue en constante evolución. Atenta a los intereses de sus miembros y a los cambios en el contexto, y empeñada en construir una propuesta colectiva de trabajo cada vez más pertinente y relevante para alcanzar transformaciones positivas en el mundo empresarial y las comunidades. Entusiasma mucho saber que nuestra capacidad para hacer frente a los desafíos crece día a día, con el concurso de los miembros, los órganos de gobierno de la Red y nuestros incondicionales aliados. Gracias a todos por su compromiso, dedicación e inspiración.
En 2017, cumpliremos 15 años, y celebraremos el compromiso de este conjunto de organizaciones empresariales con el desarrollo sostenible de las comunidades en América Latina.
Margareth Flórez